Estupor

Yo: sujeto que vive en el permanente estupor que le provocan algunas decisiones institucionales...

lunes, 22 de octubre de 2012

Bueno, de nuevo me veo en la tesitura de volver a pedir perdón a todos mis amigos, votantes o no del PSOE, porque mi partido es incapaz de conectar con la ciudadanía. Al final de tanto pedir perdón me haré el seppuku.

En el PSOE somos incapaces de entender que nuestros lideres están caducados. Somos incapaces de reconocer que nos siguen mandando aquellos que junto a Zapatero nos llevaron a la crisis o la gestionaron siendo incapaces de ver la que se nos venia encima. Somos incapaces de ver que dentro del partido debe haber gente lo suficientemente válida como para que cuando le cuenten milongas de "vosotros los mismo" puedan decir "a mi que me cuentas", o "a mi lo que hicieron me pareció igual de mal que a tí".

Somos incapaces de daros ilusión y ofreceros un PSOE en el que confiéis, y lo peor de todo es que lo entiendo, que dentro del partido muchos lo entienden, pero los que mandan no quieren escucharnos. Están sordos, mudos, aislados, incomunicados, siguen a sus batallitas de siempre por un quítame allá esa coma, mientras los ciudadanos ven cada día que su poder adquisitivo disminuye.

Lo que más me duele es ver mi partido como la perfecta comparsa del PP, este último arrasando con decenios de victorias sociales, y el PSOE de mamporrero complaciente confiando en que vosotros los ciudadanos, cualquier día, como San Pablo, os caigáis del caballo y veáis la luz. Todo antes que reconocer que lo hacemos mal, soberanamente mal.

El PSOE me duele, pero me duele más este país y lo que hacemos entre todos los políticos con el.

2 comentarios:

  1. Duele,efectivamente que duele y mucho.Pero lo peor es que no hay perspectiva de que se vaya a producir ningún cambio a corto plazo.El PSOE es como un gran paquidermo (o mediano):se mueve con mucha lentitud,mientras que el ritmo de la sociedad,de los movimientos sociales es otro.Problema de ritmos?

    ResponderEliminar
  2. Muchos de los que, con nuestro voto, hicimos fuerte al socialismo (o eso nos creímos) hemos alcanzado la edad de la resignación y poco podemos hacer ya que no sea seguir votando izquierdas. Lo triste es no contar con líderes de nuevas generaciones socialistas. Gente joven que defienda con uñas y dientes la dignidad perdida en estos últimos años.

    ResponderEliminar

Gracias por dejar tu comentario.